Significado y misión del derecho penal

Dr. Jorge W. German R

E L DERECHO PENAL ES EL ORDENAMIENTO JURÍDICO que determina las acciones naturales del criminal y las vincula con una pena o medida de seguridad.

Su misión

Es misión de la ciencia del derecho penal desarrollar el contenido de estas reglas jurídicas en su trabazón interior, es decir, sistemáticamente, e interpretarlas. Como ciencias sistemática da el funcionamiento para una ecuánime y justa administración de justicia, ya que solamente la comprensión de esa estructura interior del derecho eleva su aplicación por encima de la casualidad y la arbitrariedad. No solamente por eso, porque sirve a la administración de justicia, la ciencia del derecho penal es una ciencia ¨práctica¨, sino también, en un sentido más profundo, porque es una teoría del actuar humano justo e injusto, de modo que sus últimas raíces llegan hasta los conceptos básicos de la filosofía práctica.

La función ético-social del Derecho Penal

Es misión del derecho penal amparar los valores elementales de la vida de la comunidad.
Toda acción humana, en lo bueno como en lo malo, esta sujeta a dos aspectos distintos de valor. Por una parte puede ser valorada según el resultado que alcanza; por otra parte, independientemente del resultado que con la acción se obtenga, según el sentido de la actividad en sí misma.

Ejemplo:
Uno de los valores humanos más elementales es el trabajo. Su valor puede ser apreciado, de una parte, viendo el resultado material – la obra – que produce. Pero, con independencia de que la obra se logre o no, el trabajo en si mismo es un valor de la existencia humana.
La actividad, como tal, tiene una significación en la vida humana; ciertamente, sólo como actividad realizada con sentido, es decir, como actividad dirigida hacia el logro de una obra positiva; pero ese sentido lo conserva también entonces la actividad, aún cuando la obra se haya alcanzando…
Lo mismo ocurre en el orden negativo: el disvalor de la acción puede estar basado en que el resultado que produce es digno de desaprobación; pero también; independientemente de la obtención del resultado, una acción que tienda a un resultado reprobable es digna de desaprobación; por ejemplo: la introducción de la mano del carterista el en bolsillo vacío.
Ambas clases de valores tienen significación para el derecho penal.

Qué persigue el Derecho Penal

El derecho penal persigue, en primer lugar, amparar determinados bienes de la vida de la comunidad, tales como la existencia del Estado, la vida, la salud, la libertad, la propiedad, etc. (los llamados bienes jurídicos), determinando para su lesión consecuencias jurídicas. Esa tutela de los bienes jurídicos la obtiene prohibiendo y castigando las acciones que tienden a lesionarlos; es decir, evitando o tratando de evitar el disvalor del resultado con la punición del disvalor del acto. Con ello asegura la vigencia de los valores positivos éticos-sociales de actos, tales como el respeto por la vida ajena, la salud, la libertad, la propiedad, etc… Esos valores, que radican en el pensar jurídico permanente de una obra conforme al derecho constituyente el substrato ético-social de las normas del derecho penal. El derecho penal asegura su real observancia determinando penas para quienes se apartan de ellas a través de acciones infieles, indisciplinadas, deshonestos, desleales.

Misión central

La misión central del derecho penal reside, entonces, en asegurar la validez inviolable de esos valores, mediante la amenaza y la aplicación de pena para las acciones que se aparten de modo realmente ostensible de esos valores fundamentales en el actuar humano.
El derecho penal fijando a los actos que se apartan realmente de un actuar conforme al derecho, ampara, al mismo tiempo los bienes jurídicos, sancionando el disvalor del acto correlativo; así, asegurando la fidelidad para con el Estado, protege al Estado; asegurando el respeto por la personalidad humana, protege la vida. la salud, el honor del prójimo; con la honradez, el respeto a la propiedad ajena, etc. Fijando pena a la traición y a la alta traición, ampara la existencia del Estado; con la pena para el perjurio, asegura la verdad de la prueba; etc. Sin embargo, la emisión primaria del derecho penal no es el amparo actual de los bienes jurídicos; es decir, el amparo de la persona individual, de la propiedad, etc. pues es allí, precisamente, a donde, por regla general llega su acción demasiado tarde. por encima del amparo de los bienes jurídicos individuales concretos, está la misión de asegurar la validez real (la observancia) de los valores del actuar según el pensamiento jurídico. Ellos constituyen el más sólido fundamento sobre el que se basan el Estado y la sociedad. El mero amparo de bienes jurídicos sólo tiene una finalidad negativo-preventiva, policial-preventiva. En cambio, naturaleza positivo-ético-social: prescribiendo y sancionando el apartamiento realmente manifestado de los valores del modo más ostensible de que dispone, la validez inviolable de estos valores positivos del acto, forma el juicio ético-social de los ciudadanos y fortalece su sentimiento de permanente fidelidad al derecho.

Protección de los valores éticos-sociales elementales del sentir (acción)

Aún cuando es generalmente aceptado el concepto de que el derecho penal tiene por misión el amparo de bienes jurídicos, ello no solo es suficiente cuando la referencia se hace al contenido ético-social de nuestra disciplina. El criterio expuesto se traduce, especialmente, en el hecho de subrayar demasiado la significación del resultado, dando así, inevitablemente, marcada utilitariedad del derecho penal. Lo justo e injusto de una acción se determinan, según este criterio, conforme el grado de su utilidad o daño social. De ello resulta, no solo una marcada utilitariedad, sino también una señalada actualidad en la apreciación del valor: la utilidad actual o daño del resultado de la acción determinan el valor de la acción. Con ello se pasa por alto que al derecho penal debe interesarle menos el resultado positivo actual de la acción, que la permanente tendencia positiva del actuar humano, de acuerdo con el pensar de los juristas. Asegura el respeto por los bienes jurídicos.
Por lo expuesto, es necesario manifestar que, es misión del derecho penal la protección de los valores éticos-sociales elementales del sentir (acción), y sólo después, incluido en él, el amparo ha de limitarse a la sanción de los hechos que lesionan los deberes éticos sociales elementales.